Hecho en los Pirineos, I Congreso del producto y la gastronomía de los Pirineos, presentó su programa de actividades en el Palacio de Congresos de Huesca, donde se celebrará del 18 al 21 de marzo.
Pedro Salas, director del HP Huesca Pirineos Hautes Pyrénées, impulsado por la Agrupación Europea de Cooperación Transfronteriza (AECT), en colaboración con el Ayuntamiento de Huesca y la Cámara de Agricultura Hautes-Pyrénées, recordó que el congreso, se enmarca dentro de un proyecto más amplio, financiado con fondos Feder, que inició su andadura el pasado mes de septiembre y se extenderá hasta junio de 2019 y subrayó, ante la numerosa presencia de medios, «la gran expectativa que ha despertado este evento».
Por su parte, Elisa Sancho, vicepresidenta de la Diputación de Huesca, señaló que desde su institución se contempla el congreso como «una gran oportunidad para generar empleo, fomentar el desarrollo rural, vertebrar el territorio y luchar contra la despoblación», poniendo como ejemplo el caso de los hijos de truficultores que ya se quedan a vivir en sus localidades.
Destacó los tres aspectos del congreso, «el producto, que se valora a través de la gastronomía y ésta revierte en el propio territorio», así como «el trabajo transversal del mismo, el intercambio de experiencias y conocimiento con la otra vertiente de la cordillera, y la idea de crear un destino turístico y gastronómico en los Pirineos centrales», ya que se trata de un proyecto a largo plazo.
Por su parte, Fernando Gallego, concejal del Ayuntamiento de Huesca, destacó a «Huesca como ciudad de los Pirineos, con gran potencial gastronómico y pastelero», que ahora debe «asumir la capitalidad de un sector agroalimentario moderno y dinámico», recordando que con la celebración de este congreso se cumple un compromiso del entonces candidato y hoy alcalde, Luis Felipe.
Finalmente, Fernando Blasco, director del congreso, tras agradecer la colaboración de todo el sector, recordó que este evento se viene reclamando desde 2012, cuando se pedía a TuHuesca su creación. Así, «haciendo oído a todo lo que demandaba el sector agroalimentario y hostelero», se ha conformado un amplio programa −«ocuparemos todo el palacio a lo largo de cuatro días»− que se sale de lo habitual en estos eventos, ya que combina feria, diferente de lo usual, y congreso propiamente dicho.
«No es un congreso al uso. Aquí se antepone la figura del productor». Así, se debatirá en torno a las cuestiones que le preocupan, como la comercialización, su figura en la vertebración del territorio o la investigación», siempre desde el debate, con «tres perspectivas diferentes, para generar debate y tratar de llegar conclusiones». De la misma manera, «en presencia del productor, dos cocineros, uno oscense y otro foráneo, sin competir, presentarán su propuesta de cocina en torno a dicho producto del Pirineo».
Pero el congreso es mucho más. Durante el fin de semana, 18 y 19 de marzo, tendrá lugar un feria agroalimentaria, aunque «no al uso. Los expositores podrán vender o simplemente exponer y mostrar su producto». Habrá actividades para los niños, unos treinta talleres (catas, degustaciones, demostraciones de cocina, exhibición de perros truferos, degustación de helados con trufa, charlas, clases de fotografía, etc.), un ciclo permanente de cine y gastronomía.
Concluyó Fernando Blasco que «cumplimos una meta volante en este trabajo de promoción de la gastronomía oscense», destacando que la amplia oferta del territorio daba para cuatro o cinco congresos. «Hemos elegido este modelo tras escuchar a todos los implicados, intentando aglutinar una parte del todo de la provincia. Pues contamos con el apoyo de todo el sector, aunque algunos hayan preferido no mostrarse».
Fotos: Gabi Orte «Chilindrón»